La sal puede ser la causa de dolores de cabeza recurrentes.
Un estudio sometió a un grupo de personas a tres dietas sucesivas de contenido en sodio bajo, medio y alto (de 4 a 8 g diarios), aportado principalmente por la sal de mesa (molécula de cloruro sódico). Los participantes debían anotar la frecuencia con la que tenían dolores de cabeza en cada uno de los períodos.
El análisis de esta experiencia muestra que, durante el período en el que los participantes seguían la dieta más rica en sal, la frecuencia de sus dolores de cabeza era un 30% más elevada que cuando seguían el régimen más bajo en sal. Así pues, la sal provocaría dolores de cabeza con independencia de que aumente la tensión arterial, teniendo en cuenta que la tensión elevada es un factor causante de cefalea.
El problema es que la sal está muy presente en todos los productos industriales. Incluso una simple barra de pan aporta…hasta ¡2 g de sodio! en forma de sal.