Muchos de los deportes actuales tienen un impacto ambiental, sobre todo cuando se trata de eventos masivos: la contaminación y los gases de efecto invernadero producidos tienen consecuencias en el ecosistema.
Además de ser beneficiosos para la salud, aquí tenéis una pequeña lista con alguno de los más sostenibles, porque practicar deporte también tiene un impacto en el ambiente.
1. NATACIÓN. La natación es uno de los deportes más sostenibles, además de ser muy completo a la hora de hacer actividad física. Preferiremos la práctica en ambientes naturales, evitando las piscinas artificiales cuya agua contiene un exceso de químicos limpiadores.
2. SENDERISMO. Este deporte es una de las mejores opciones para practicar al aire libre, tanto en solitario como en grupo. Es mejor respetar los senderos previamente señalizados y no tomar según qué caminos que podrían alterar su naturaleza.
3. ARTES MARCIALES. El Tai Chi, el Chi Kung, y las artes marciales en general, pueden practicarse en ambientes cerrados o abiertos, combinando estrategia y agilidad. Es una opción bien sostenible: tan solo requiere nuestra propia energía, evitando el impacto ambiental.
4. CICLISMO. El ciclismo es sin duda uno de los deportes más ecológicos. Se trata de una opción perfecta para hacer ejercicio sin generar impacto en la naturaleza, si exceptuamos la fabricación de la propia bicicleta. Lo podemos practicar tanto en la ciudad como en ambientes más verdes y naturales.
5. ATLETISMO. El atletismo o running es muy común en estos días. Es uno de los deportes más sostenibles. Solamente necesitarás calzado cómodo, ropa ligera y ganas de correr. Muy recomendado para la salud física y mental.
6. PLOGGING. Es una iniciativa sueca similar al atletismo que ayuda a limpiar el planeta mientras se hace ejercicio. Los miles de personas que practican este deporte (combinado con activismo) van recogiendo la basura que encuentran en el suelo, para luego colocarla en el cesto correspondiente.
Estos deportistas pues disminuyen la contaminación mientas practican actividad física.
La palabra viene de la unión de running (corriendo en inglés) y plocka upp (expresión sueca para recoger). Es una actividad con tanto éxito que ya se practica también bajo el agua.
Se considera que alrededor de un 30% de la población sale a correr al menos tres días a la semana. Aprovechar esas salidas de ejercicio para sumar recogidas de desechos durante el recorrido puede tener un rápido impacto en el cuidado del entorno.
La idea es sencilla: los ploggers salen a la calle con una bolsa de basura para recoger los desperdicios que se encuentran a su paso durante la práctica deportiva que hagan.
El multideportista Erik Ahlström es el impulsor de esta actividad. Al dejar su pueblo en 2016 se instaló en Estocolmo, donde empezó a limpiar de basura los lugares que frecuentaba mientras hacía deporte. Poco tiempo después extendió su rutina por toda Suecia, mediante eventos populares. En 2016 estaba en Instagram y en 2018 llegó a otros países.
Beneficios del plogging
- Cuida tu entorno y tu salud. Cuando se hace deporte el cuerpo se beneficia, por ejemplo, se tonifican los músculos, fortalece los huesos, se mejora la función cardiovascular, queman las calorías, refuerza el sistema inmunitario, etc. Además, al recoger basura de la calle se le está dando un extra a la actividad y se mejora el entorno en el que vivimos.
- Es ideal para que se trabaje la intensidad, en lugar de recorrer distancias largas. Al tener que agacharse y levantarse (sentadilla) es una buena forma para que los glúteos y la pierna se tonifiquen. Aunque no a todo el mundo le hacen gracia, las sentadillas son fundamentales para conseguir fortalecer nuestros glúteos y piernas.
Aunque parecen sencillas de hacer, tenemos que estar muy atentos a la posición para no lesionarnos. Los pies han de estar separados por la misma distancia que tenemos entre los hombros. Y las rodillas han de permanecer alineadas con los tobillos en cada bajada.
- El ambiente también tiene un beneficio. Al recoger los desechos se evita la contaminación del suelo y sus consecuencias.
- Se reduce el riesgo de problemas cardíacos, aumentando la capacidad pulmonar y la digestión.
- La energía se incrementa, al igual que la capacidad física mejora la oxigenación del mismo organismo.
- Se queman calorías y se puede reducir el peso.
¿Correr? Dejando aparte el plogging, lo mejor es correr por el bosque (ver el número 393).
HACER DEPORTE DE FORMA SOSTENIBLE
Utiliza materiales biodegradables y respetuosos con el planeta: hay ropa y calzado deportivos que se fabrican con materiales sintéticos o su cadena productiva no suele ser sostenible. Todas las actividades deportivas permiten que reduzcamos el impacto ambiental. En el caso del esquí, por ejemplo, es ideal cambiar la modalidad del esquí alpino, más contaminante, por el esquí de fondo, más respetuoso con la naturaleza. En cuanto a los materiales, ya existen, por ejemplo, esquís de bambú.
También en el surf se emplean materiales amigables con la naturaleza, como las tablas de soja.
En dos palabras, conviene reflexionar sobre el tipo de actividad deportiva, si la organización cuenta con iniciativas sostenibles y cómo podemos concienciar a los deportistas a ejercitarse con responsabilidad ambiental.