La acerola (Malpighia glabra, Malpighia emarginata) es el fruto de un pequeño árbol que crece hasta los cinco metros de altura. Procede de la parte norte de Sudamérica, Centroamérica y el Caribe y se utiliza habitualmente como antianémico, fungicida (contra los hongos), antiinflamatorio, antioxidante, astringente, diurético y nutritivo.
Vitamina C
Se distingue por su alto contenido de vitamina C que puede ser hasta 80 veces mayor que el de una naranja. Además de contener un elevado contenido de vitamina C, la acerola es también rica en carotenos. y en valiosos nutrientes como el magnesio, las vitaminas A, B1, B2, la niacina, el ácido pantoténico y el potasio.
La vitamina C es una vitamina soluble en agua y cofactor esencial para la síntesis de colágeno, carnitina y el metabolismo de las catecolaminas (como la adrenalina o la dopamina), así como para la absorción de hierro dietético. El ser humano no es capaz de sintetizar vitamina C, por lo que se obtiene estrictamente a través de los alimentos, en especial frutas y verduras frescas.
Tanto el jugo como la fruta fresca de acerola se emplean en Brasil contra la fiebre y la disentería. Para ello se toma normalmente ½ taza de jugo o un puñado de frutas de dos a tres veces al día. Existen también otros frutos muy ricos en vitamina C –no solo los cítricos–, como el camu-camu y otras frutas tropicales.
Excelentes propiedades antioxidantes
Estudios recientes demuestran que los efectos antioxidantes de la vitamina C de la acerola son de gran ayuda a la piel. En base a este dato están apareciendo productos cosméticos con extractos de acerola, que además contiene sales minerales que ayudan a la remineralización de la piel.
La acerola también se utiliza como remedio contra la anemia, problemas hepáticos, el colesterol elevado, reumatismo, tuberculosis, y durante periodos de convalecencia.
En combinación con la soja y los germinados de alfalfa, la acerola incrementa sus efectos reductores del colesterol. Posee además un alto contenido de mucílago y proteínas con propiedades hidratantes y promotoras de la integridad capilar. Por otra parte existen evidencias de que la acerola puede tener un efecto contra la proliferación de células cancerosas, al igual que otros alimentos ricos en antioxidantes.
Mejor si está verde
El contenido de vitaminas de la acerola está en su mayor nivel antes de madurar. Al comenzar a madurar va perdiendo vitaminas. Por eso es preferible consumirla cuando aún está un tanto verde