¿El petróleo infinito?
Hace más de 125 años que Julio Verne nos habló del hidrógeno verde. Lo hizo en su novela La isla misteriosa: «¿Qué es lo que van a quemar en lugar de carbón?… Agua. El agua descompuesta en sus elementos por la electricidad se empleará algún día como combustible.» Es decir: hidrógeno.
Ahora bien, ¿hidrógeno blanco o hidrógeno verde? El descubrimiento en Lorena, al norte de Francia, de yacimientos de hidrógeno cualificado de «blanco» ha despertado una gran expectación. El hidrógeno blanco se obtiene de forma natural, no es necesario producirlo. Pero el modelo para utilizarlo que se propone sigue siendo el que conocemos para el petróleo como fuente de energía fósil barata.
¿Hidrógeno para sustituir el petróleo?
Repasemos: el hidrógeno es el elemento químico más simple (formado solamente por un protón y un electrón) y más abundante del universo. Se encuentra principalmente en forma de gas hidrógeno (H2) en las estrellas y en los planetas gaseosos, y además aparece unido a otros elementos formando gran variedad de compuestos químicos, como el agua (H2O) y la mayoría de los compuestos orgánicos.
El gas hidrógeno es, en condiciones normales de presión y temperatura, incoloro, inodoro, no tóxico e inflamable, con un punto de ebullición de -252,77 ºC y un punto de fusión de -259,13 ºC. Puede reaccionar con oxígeno (O2) desprendiendo energía y formando agua. Esta reacción se conoce como combustión y en ella el hidrógeno es el combustible.
El carbón, el gas natural o la gasolina (petróleo), los conocemos como combustibles fósiles porque provienen de compuestos formados por la actividad de los seres vivos hace millones de años. Todos ellos pueden reaccionar también con oxígeno y producir energía. Como también, por ejemplo, el metano (gas natural), que curiosamente se puede obtener de los excrementos, a través de digestores.
Los combustibles fósiles son la base del transporte tal como lo conocemos (coches, aviones, barcos), la calefacción de edificios o el trabajo de las máquinas del sistema industrial.
¿Contamina o no contamina?
La combustión del hidrógeno no contamina, sólo produce como subproducto agua (reacción 1), mientras que los combustibles fósiles producen CO2 (reacción 2) que queda en la atmósfera como contaminante y es uno de los mayores responsables de lo que conocemos como efecto invernadero.
Las reservas de combustibles fósiles se agotarán tarde o temprano, mientras que el hidrógeno permanecerá inagotable. Ahora bien, el hidrógeno verde (limpio) es carísimo de producir, y el propio proceso ya no es tan ecológico.
¿Es fácil de obtener?
Sustituir petróleo por hidrógeno para mover el mundo es un asunto complicado en el momento actual. ¡Por eso no lo encontramos en todas partes!
¿Por qué? Porque, a diferencia de los combustibles fósiles, el hidrógeno no se encuentra en estado libre en nuestro planeta, sino formando compuestos como el agua o la mayoría de los compuestos orgánicos.
Además, el transporte requiere una serie de conductos especiales y la construcción de una completa red de estaciones de servicio de hidrógeno (las futuras «hidrogeneras»), lo cual implica una fuerte inversión.
Por eso el hidrógeno no puede ser considerado como una fuente primaria de energía como los combustibles fósiles) Los expertos dicen que en realidad es un «vector energético» que se transformará en energía y calor de una forma eficiente y limpia, mediante un proceso químico conseguido en un equipo denominado «pila de combustible».
Hidrógeno blanco. Francia y España
En Francia acaban de autorizar el primer proyecto de investigación sobre el hidrógeno “blanco” –el que se encuentra almacenado como gas en el subsuelo de manera natural– también en la región de los Pirineos Atlánticos.
En España, en la década de 1960 se descubrió un yacimiento en Monzón (1,1 millones de toneladas aprovechables, quizá alrededor de 100 en toda la provincia), y en la actualidad, la empresa Helio Aragón (filial de British Petroleum y Axión) está buscando alianzas con diferentes socios.
«El proyecto utilizará la tecnología, los equipos y los conocimientos existentes para producir 24 horas al día, 7 días a la semana, complementando el suministro cuando no se pueda producir hidrógeno verde. Los conceptos de desarrollo de las instalaciones, que ocupan una superficie muy reducida en comparación con la eólica y la solar, se han calculado por completo y se han diseñado para dar cabida a una gama de hidrógeno y helio sobre el terreno”, añaden desde Helios Aragón. El proyecto Hidrógeno Natural Monzón contempla una inversión de alrededor de 900 millones de euros en 20 años con una generación de empleo de 300 puestos de trabajo directos y 1.500 indirectos.
No obstante, no sería la primera exploración del mundo. En febrero, la revista Science recogió algunos de los proyectos más importantes, todos muy recientes. En Mali ya se ha extraído a un coste de 0,50 dólares/kg, lo que lo convierte en la forma de hidrógeno más barata del mundo. En 2019, la startup Natural Hydrogen Energy exploró el primer pozo de EE. UU. en Nebraska. Australia, por su parte, cambió su regulación en 2021 para permitir este tipo de perforaciones, lo que ha propiciado el auge de estudios e inversiones.
Sobre el resto de «colores del hidrógeno» (gris, naranja, púrpura…) podemos olvidarnos de todos ellos: son caros y/o contaminan.
El hidrógeno no solucionará nada mientras no cambiemos la mentalidad y hábitos de consumo.
Redacción de Integral
El hidrógeno en Integral: 202, 456 (coche Toyota), 482 (coche Evram), 512 (primeras plantas para producir hidrógeno verde), 521 (hidrógeno verde fabricado en España) 522 (tren en pruebas).