Al igual que en el caso de los hombres durante la andropausia, el deseo sexual de las mujeres puede disminuir durante la menopausia debido al descenso en el nivel de estrógenos asociado a la libido. Algunos investigadores ya habían señalado que el extracto de hojas de ginkgo (Ginkgo biloba) parecía tener efectos similares a los estrógenos en cultivos celulares. Sólo quedaba probarlo en vivo, y eso es lo que acaba de hacer un estudio serio (aleatorio triple ciego, en el que tanto los pacientes, como los investigadores y quienes adjudican los resultados desconocen la intervención asignada a cada grupo de estudio).
Durante tres semanas, dos grupos de mujeres con edades comprendidas entre 50 y 60 años siguieron sendos tratamientos: uno con un placebo y otro con 240 mg de extracto de ginkgo. Su deseo sexual se midió según la escala de evaluación Sabbatsberg, que tiene en cuenta la actividad sexual, la excitación, el placer, el orgasmo, la satisfacción y la importancia que reviste el sexo en general en la vida cotidiana.
Tras el tratamiento, el 64,5% de las mujeres del grupo que había tomado extracto de ginkgo constató un aumento de su deseo sexual frente a sólo el 34,4% de las del grupo del placebo. En otras palabras, a mayor edad, conviene tomar ginkgo, famoso también por sus efectos como protector de las funciones cognitivas.
Sólo han de evitarlo quienes sigan un tratamiento con anticoagulantes a largo plazo, por ejemplo, con aspirina o con AVK (antagonistas de la vitamina K).